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Síntomas y diagnóstico de la EM

¿Cuáles son los síntomas de la esclerosis múltiple?

Debido a la forma en que la esclerosis múltiple (EM) altera la forma en que el cerebro y la médula espinal se comunican con el resto del cuerpo, los síntomas pueden afectar a las personas de diferentes maneras y afectar diferentes partes del cuerpo.

Los síntomas varían según la zona afectada dentro del sistema nervioso central y el grado de daño. Suelen aparecer entre los 20 y los 50 años y pueden aparecer y desaparecer en recaídas o empeorar con el tiempo.

Algunas personas solo presentan síntomas leves y pueden pasar mucho tiempo antes de que aparezcan nuevos. El período sin nuevos síntomas se denomina remisión.

La gravedad de los síntomas fluctúa y puede manifestarse de manera diferente en distintas personas.

Algunos de los síntomas más comunes se deben directamente a la forma en que la EM afecta al sistema nervioso. Entre ellos se incluyen:

  • Entumecimiento u hormigueo: puede notar estas sensaciones, llamadas parestesia, en la cara, los brazos, las piernas o los dedos, afectando específicamente un lado del cuerpo.
  • Sensaciones de choque: Al mover el cuello , puede sentir una descarga eléctrica. Esto se conoce como el signo de Lhermitte.
  • Debilidad o espasmos musculares: Debilidad que afecta el brazo, la pierna o un lado del cuerpo. Después de un tiempo, podrías notar espasticidad o espasmos musculares.
  • Mareos y problemas de equilibrio: Puede presentarse descoordinación en la mano o la pierna, o pérdida de destreza. Estos síntomas también pueden dificultar la marcha.
  • Problemas de visión: Puede tener visión borrosa o doble, o dolor al mover los ojos. Puede notar diferencias en la forma en que ve los colores rojo y verde. Los problemas de visión pueden deberse a la neuritis óptica (inflamación del nervio óptico) y suelen afectar un ojo a la vez.
  • Problemas de habla y audición: Puede tener dificultades para hablar o escuchar correctamente. Puede arrastrar las palabras.
  • Cambios en la vejiga, los intestinos o en la función sexual: Usted podría tener problemas para controlar la vejiga o los intestinos y tener cambios en su función sexual.

También puede experimentar otros síntomas relacionados con la EM que no están directamente relacionados con sus efectos sobre el sistema nervioso. Estos pueden incluir:

  • Fatiga: Sentirse muy cansado es uno de los síntomas más comunes e incapacitantes. Puedes sentirte agotado después de la actividad física y mejorar después de descansar, o puedes sentirte fatigado todo el tiempo.
  • Cambios en el pensamiento: La EM puede dificultarle concentrarse o recordar cosas. Podría tener dificultades para prestar atención o usar el buen juicio.
  • Cambios de humor: Es posible que sufras depresión o tengas cambios emocionales.
  • Complicaciones secundarias: La EM puede provocar otras complicaciones, como infecciones del tracto urinario debido a problemas de vejiga o neumonía debido a problemas para tragar.

¿Cuándo debería hablar con un proveedor de atención médica?

Contacte a un profesional de la salud si nota entumecimiento, debilidad, cambios en la visión o falta de coordinación durante más de 24 horas, especialmente si estos síntomas no mejoran con el descanso o están acompañados de otros síntomas. El diagnóstico temprano es fundamental. Puede conducir a un tratamiento más oportuno y mejorar su calidad de vida.

¿Cómo se diagnostica la EM?

Dado que la EM afecta a cada persona de forma diferente y puede parecerse a otras afecciones, llegar a un diagnóstico puede ser difícil y llevar tiempo. Le recomendamos consultar a un neurólogo especializado en EM para que le realice pruebas y le haga un diagnóstico.

No existe una única prueba para la EM, por lo que los proveedores de atención médica utilizan una combinación de pruebas para descartar otras causas y confirmar la EM:

  • Historial de salud: Preguntas sobre su visión, equilibrio, sentidos, movimiento, coordinación, lenguaje y funciones mentales y emocionales pueden ayudar con el diagnóstico.
  • Examen neurológico: esta prueba verifica si hay cambios o problemas con su coordinación, visión, reflejos y fuerza.
  • Resonancias magnéticas: Estas pruebas de imagen buscan lesiones o daños en el cerebro y la médula espinal. Es posible que necesite un medio de contraste para determinar si presenta cambios activos relacionados con la EM.
  • Punción lumbar (punción raquídea): Esta prueba analiza el líquido cefalorraquídeo para detectar signos de inflamación. También permite descartar otras afecciones que podrían estar causando los síntomas.
  • Tomografía de coherencia óptica: Esta prueba crea imágenes del ojo con ondas de luz. Permite detectar daños en el nervio retiniano y cambios en el grosor de la retina.
  • Análisis de sangre : Los análisis de sangre pueden ayudar a descartar otras causas de los síntomas.
  • Potenciales evocados: estas pruebas miden la rapidez con la que el cerebro responde a la información sensorial, como la vista, el sonido o el tacto.

Tipos de esclerosis múltiple

Existen diferentes formas de EM, según cómo empeoran los síntomas y la frecuencia con la que se producen las recaídas.

Esclerosis múltiple remitente-recurrente (EMRR)

La EM RR es el tipo más común de EM. Provoca ataques repetidos con periodos entre ellos en los que los síntomas son menos graves. Es posible que presente nuevos síntomas o una recaída que dure días o semanas. Posteriormente, los síntomas mejoran o desaparecen en remisiones que pueden durar meses o años.

Se le puede diagnosticar este tipo de EM si ha tenido dos ataques con al menos un mes de diferencia y presenta al menos dos áreas con daño en la mielina. El diagnóstico suele basarse en los síntomas y en los resultados de una resonancia magnética que muestran lesiones en zonas específicas de la EM. Este diagnóstico lo realiza un neurólogo o un especialista en EM.

Esclerosis múltiple progresiva secundaria (EMSP)

La EMRR puede evolucionar a EMSP con el tiempo. En la EMSP, los síntomas comienzan a empeorar progresivamente, con o sin periodos de remisión. Los síntomas suelen afectar el movimiento y la marcha, y pueden empeorar más lenta o rápidamente en diferentes personas con este tipo de EM.

La EMSP afecta entre el 20 % y el 40 % de las personas con EMRR y suele aparecer entre 10 y 20 años después del diagnóstico de EM. Si bien es tratable, puede ser frustrante y más difícil de tratar que la EMRR.

Esclerosis múltiple progresiva primaria (EMPP)

La EMPP causa síntomas que empeoran con el tiempo, pero no se presentan en episodios. Puede haber momentos en que los síntomas se estabilicen o mejoren un poco, pero generalmente empeoran. La velocidad de empeoramiento puede variar.

Aproximadamente el 10 % de las personas con EM padecen este tipo y afecta por igual a hombres y mujeres. Es más difícil de tratar que otros tipos de EM.

Formas raras de EM

Estos tipos de EM no se encuentran muy a menudo:

  • Esclerosis múltiple tumefactiva: Las lesiones parecen tumores cerebro . Es posible que el médico necesite tomar una muestra de tejido cerebro para determinar si se trata de EM o de un tumor cerebro .
  • Esclerosis concéntrica de Balo: Las lesiones aparecen en forma de diana.
  • Esclerosis múltiple variante de Marburgo: este tipo agresivo de EM empeora rápidamente.

También le podrían diagnosticar:

  • Síndrome clínicamente aislado: Se refiere a la primera vez que presenta un síntoma que indica el primer ataque de EM. Las pruebas pueden mostrar cambios indicativos de EM, pero aún no cumple todos los criterios.
  • Síndrome radiológicamente aislado: se refiere a signos en una resonancia magnética que parecen EM cuando no hay síntomas notables de EM.

Obtenga más información sobre las opciones de tratamiento para la EM y lo que puede hacer para controlar los síntomas y retrasar el daño de la enfermedad.

Si está preocupado por sus síntomas, consulte con un neurólogo de Banner Health para obtener asesoramiento y orientación.